Fortana del Taro. Una cepa con una historia secular

de Virginia Genco

Seis siglos testimoniados en seis hectáreas de tierra. Parece, de hecho, que ya en el 1400 en la Baja Parmense fuera cultivada la Fortana. Una cepa autóctona, de origen francesa, probablemete de la Côte d’or en Borgoña, desde la cual ha seguramente traido su apodo “uva de oro”. 

Este apodo no se refiere simplemente a su origen, pero también a su elevada productividad que produce riqueza y seguridad para los productores. Tiene la misma denominación del río Taro que se desarolla en la Baja Parmense antes de meterse en el río Po. Este nombre lo hace mas enchufado con el lugar.

Una  viña fuerte y vigorosa, que produce vino tinto auténtico, amable y fino, que en pasado ha arriesgado exstinguirse por la costante búsqueda de espacios a destinar a la agricultura. Los hermanos bergamaschi, con sus Bodegas a Samboseto, cerca de Busseto,  entre la Calle Emilia y el Po, han conseguido guardarla y convertirla en un producto tipico de la comarca de Parma. Participan al gran proyecto nombrado Rural, que une criadores y agricultores de la región, los tres hermanos respectan el compromiso de guardar y proteger con pasión la biodiversidad del territorio, salvaguardando su producto autóctono. Una pasión que se trasmite desde generaciones.

¿Qué os ha inspirado para tomar el desafío de dar nueva vida a una cultura en peligro de extinción como la uva Fortana?

Siempre hemos creído en este producto, que fue uno de los vinos más tradicionales de la comarca de Parma.Y se estaba perdiendo. Mi abuelo, en los años sesenta ha guardado uno de estas cepas, implantandola y convirtiéndola en una viña intensiva. Luego ha pedido a sus amigos agricultores de no extirparla, y siempre se la ha pagada mucho. Gracias a él, nosotros hemos podido guardarla hasta los años noventa, cuando la Región nos ha permitido replantarlos en algunas héctareas. Hoy tenemos 6 héctareas de esta viña original de la cepa del Fortana del Taro de Parma, que ha conseguido la indicación geográfica típica (IGT).

Varidedad fructuosa, numerosas solicitudes. ¿Armonía perfecta?

Si, es una vino muy requerido, Gracias también al bajo contenido de azucar, a la moderada gradación y al característico gusto fresco y frutuoso es muy bueno para berer. Tiene mucha acidez y polifenoles, entonces es astringente y combate las grasas. Perfecto para beberlo comiendo los embutidos locales. Además el uso local, también tiene buen exito en las otras partes de Italia y al extranjero.

¿Pensáis a una extensión de la cepa?

No. Quieremos tenerla así como es. Un producto para pocas personas.

¿Más valor a la calidad, por lo tanto?

Si. Miramos a un producto de cantidad limitada pero de alta calidad.

¿Por lo que concierne las normas europeas para la defensa del biológico y de los pequeños productores, realmente os sentís protegidos y facilitados o os teneis algún problema comercial a nivel internacional?

Como en todas las cosas, cuando hay cambios, los cotejos positivos van de mismo paso que los problemas. Hay que conformarse. De todas formas la tutela funciona en el caso de nuestra viña autóctona. Somos una entidad muy localizazda y en esta epoca somos satisfechos de la situcación a nivel europeo. Además nuestra produción es dirigida por normas, como aquellas de las cuotas de la leche. Cuando hay una superficie se puede utilizar solo aquella. No se pueden plantar nuevas cepas al menos que no se compra la cuota de otro productor.


¿Os quedaréis concéntrados sobre la producción de este vino?
Tenemos unas variedades de otros vinos. Pero el Fortana del Tano es el producto local de referencia. Es decir un símbolo por el territorio. 

Vuestra historia es familiar. A partir del abuelo, siguiendo en las manos de vuestros tres hermanos. ¿Pero os seguirán las nuevas generaciones?
Tenemos un nieto de 18 años y uno de 13 años que ya nos dan algunos consejos y realmente se demuestran aficionados. Esperamos que nuestra empresa pueda tener un futuro con ellos. 


También porque sería una lastima perder una "historia de vino" tan importante.
Claro, es raro que las empresas consigan continuar por más generaciones. En nuestro caso estaríamos encantados si la tradición continuara con uno de los dos.

Pero hablamos de calidad y autenticidad de los productos que os llevais sobre las mesas: ¿productores y consumidores son más atentos?
A pesar de la crisis económica, hemos logrado mantener muy activo este comercio. Es continuar luego nuestro empeño en el respeto de la sana revaluación de un producto de gran calidad.

¿La llegada de los social media ha sido una ulterior posibilidad de difusión de vuestro producto en Italia y también al extranjero?

Son nuestros nietos que nos ayudan en gestionar los canales diferentes de difusión y venta. Facilitan el boca a boca por la página Facebook a parte del sitio internet ( http://www.fortanadeltaro.it/Fortana/index.asp). Gracias al web la gente puede encontrarnos en toda Italia, como en el mundo. Hemos tenido en los últimos años contactos con Norte de Europa, Francia, Alemania, España. También vienen a conocernos en vivo.

 

¿Con cuáles productos locales vuestro vino se combina?

Sobre todo con la “Spalla Cotta” de San Secondo y el “Culatello” de Zibello. Pero en general, pensando en los platos y en las especialidades domésticas se crea un circuito de difusión de los productos, recíproco y continuo. Una buena realidad y una eficaz sinergia promocional.

 

(El Cortijo rosa de los Sótanos Bergamaschi, conseguido por los Majuelos autóctonos de la zona, en el 2005 ha sido premiado entre los 'Top hundred', los ciento mejores vinos italianos.)

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